sábado, 22 de mayo de 2010

hijo del membrillo


(imagen: cydonia oblonga)

"Hubiera salido a ti
en lo dulce y en lo vivo,
en lo abierto de la risa
y en lo claro del instinto,

y a mí... tal vez que saliese
en lo triste y en lo lírico,
y en esta torpe manera
de verlo todo distinto.

¿Te acuerdas de aquella tarde,
bajo el verde de los pinos,
que me dijiste: -- ¡Qué gloria
cuando tengamos un hijo!?"

Rafael de León "Romance de aquel hijo"

2 comentarios:

Raúl M. Olmos dijo...

Me gustan los membrillos, sobre todo sus flores!! El fruto hace años que no lo pruebo, les resulta algo fuerte a mis intestinos, pero de pequeño recuerdo haberlo merendado muchas tardes en casa de mis abuelos!!
Besos

Pilar dijo...

el membrillo es otro de los árboles andalusíes más abundantes de mi sierra... crecen al igual que los granados... ya asilvestrados, en los alrededores de la casa y sus frutas son poco utilizadas en estos tiempos... pero tienen mucha belleza en porte, flores y frutos¡¡
yo también tengo recuerdos de infancia con el dulce de membrillo que hacía mi abuela, dulce, dulcísimo, ummmmmm ^__^
ahora lo hago yo para mis dos peques... eso será en septiembre¡¡¡
besos