los celtas, que tanto veneraban a los árboles,
no sólo veían en ellos la esencia de la vida
sino el recurso para predecir el futuro,
y describir el carácter de las personas,
en función del árbol que regía el día de su nacimiento...
justo ahora es el árbol de las castañas...
(aquí puedes consultar el horóscopo arbóreo)
en esta vieja encina sin embargo lo que encontré
fué un duende...
"duende", que en el diccionario,
es un espíritu fantástico,
y ese encanto misterioso e inefable...
que nos regalan algunas personas¡¡¡
6 comentarios:
Muy graciosa la cabeza de duende en el tronco. Un beso
Vaya, buena vista tienes, al ver el duende desde lejos... Aunque quizá es el aislamiento campesino el que está haciendo que empieces a imaginar más de la cuenta...
a mí también me pareció curioso, Elvira¡¡¡ besos
vaya, Antonio...
mejor vista he tenido... pero los desvaríos nada que ver con mi vida en el campo, jejejeje... conmigo vienen de serie¡¡
un saludo
¡Caray, Pilar, tu si tienes "duende"! esa magia especial para ver más allá de lo aparente y más lejos del horizonte.
Me ha encantado tu conjunto de simbologías celtas y la mirada de fantasía hacia la encina.
Muchos besos!
Muchas gracias, Montse¡¡
hay que conservar la magia en la mirada¡¡¡ aunque como el árbol mantengamos los pies en la tierra ¿verdad?
mil besos¡¡¡
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