martes, 9 de marzo de 2010

no es enero pero parece

 
 
 
Las tardes de enero

"Va cayendo la noche: la bruma
ha bajado a los montes el cielo:
una lluvia menuda y monótona
humedece los árboles secos.

El rumor de sus gotas penetra
hasta el fondo sagrado del pecho,
donde el alma, dulcísima, esconde
su perfume de amor y recuerdos.

¡Cómo cae la bruma en el alma!
¡Qué tristeza de vagos misterios
en sus nieblas heladas esconden
esas tardes sin sol ni luceros!

En las tardes de rosas y brisas
los dolores se olvidan, riendo,
y las penas glaciales se ocultan
tras los ojos radiantes de fuego.

Cuando el frío desciende a la tierra,
inundando las frentes de invierno,
se reflejan las almas marchitas
a través de los pálidos cuerpos.

Y hay un algo de pena insondable
en los ojos sin lumbre del cielo,
y las largas miradas se pierden
en la nada sin fe de los sueños.

La nostalgia, tristísima, arroja
en las almas su amargo silencio,
y los niños se duermen soñando
con ladrones y lobos hambrientos.

Los jardines se mueren de frío;
en sus largos caminos desiertos
no hay rosales cubiertos de rosas,
no hay sonrisas, suspiros ni besos.

¡Como cae la bruma en el alma
perfumada de amor y recuerdos!
¡Cuantas almas se van de la vida
estas tardes sin sol ni luceros!"

Juan Ramón Jiménez


"La certidumbre llega como un deslumbramiento.
Se existe por instantes de luz. O de tiniebla.
Lo demás son las horas, los telones de fondo,
el gris para el contraste. Lo demás es la nada. "

Rafael Guillén

4 comentarios:

Antonio Manuel Jiménez Conejo dijo...

Gracias por darnos a conocer este maravilloso poema. Tienes un gusto exquisito.

Pilar dijo...

muchas gracias Antonio Manuel¡¡
los dos poemas los conocí ayer, pero sobretodo el de Juan Ramón, me pareció sublime¡¡¡
y lo bien que expresa esa tristeza que tenemos por el sur este invierno de tantísima lluvia...
saludos paisano¡¡

Elvira dijo...

Precioso poema, Pilar!

Un beso (mañana hará sol)

Pilar dijo...

Gracias por venir, Elvira¡¡
a mí también me ha encantado¡¡
besos